Un joven de 30 años que enfrenta cargos federales de pornografía infantil contra una menor de 12 se declaró no culpable hoy, jueves, ante la magistrada Camille Vélez Rivé.

Según el pliego acusatorio, José Raúl Meléndez Alicea conoció a la presunta víctima a través de su jefe, de quien es hijastra. El acusado y la niña comenzaron a intercambiar mensajes de texto, luego de encontrarse con ella en la boda de su supervisor, en enero pasado.

Meléndez Alicea, quien trabajaba en Caribbean Cinemas de Fajardo, supuestamente le dijo a la menor que le gustaba y le preguntó si quería ser su novia. Desde entonces, intercambiaron fotos desnudos y explícitas a través del programa "WhatsApp" por teléfono celular.

Cuando agentes de la Oficina de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE-HSI, por sus siglas en inglés) entrevistaron a la presunta perjudicada el 29 de abril pasado, la menor relató que le envió dos vídeos de ella desnuda y él le enviaba fotos iguales a ella. Destacó que le enviaba un mínimo de cinco imágenes diarias.

La menor agregó que iban al cine regularmente y él le tocaba sus partes íntimas. Aclaró que nunca sostuvieron relaciones sexuales, aunque conversaban sobre la posibilidad de que él la buscara a la escuela para ir a un motel.

Los hechos se supieron cuando la madre de la niña notó que la menor estaba enviando mensajes de texto mientras hacía sus asignaciones. Al coger el celular, observó un mensaje que decía “te amo”. La mujer, según la investigación, confrontó a su hija, quien le dijo que ella se lo envió a Meléndez Alicea porque “tenía una relación con él”. Una hermana de 16 años de la niña se molestó porque, según dijo, Meléndez Alicea también le había dicho a ella que la amaba y le había pedido un beso, pero ella lo ignoró.

La madre de las niñas se comunicó con Meléndez Alicea y se encontraron en un restaurante de comida rápida, donde el acusado le dijo que “estaba enamorado de su hija y que quería casarse con ella cuando cumpliera 18 años”. El hombre supuestamente agregó que arriesgaría todo, hasta ir a la cárcel.

Agentes federales entrevistaron a Meléndez Alicea el 30 de abril y este les enseñó dos fotos y dos vídeos de la menor. Aceptó que intercambiaban fotos de índole sexual y que él guardó aproximadamente 200 imágenes de la niña. Destacó que “sabía que podía meterse en problemas por el tipo de relación que tenía con ella”.

Al día siguiente, se comunicó con la agente para decirle que se sentía “extremadamente triste” ante la posibilidad de ser arrestado y que quería suicidarse, que amaba a la niña y que nunca quiso hacerle daño.

Fue arrestado el 3 de mayo.

Meléndez Alicea continuará detenido en el Centro de Detención Metropolitano (MDC, por sus siglas en inglés), en Guaynabo, al no concederse fianza.

Es representado por la abogada Melanie Carrillo, de la Oficina del Defensor Público Federal. El caso en su contra lo dirige la fiscal Julia Meconiates.